La universidad y el documental sonoro, la ficción y el documental sonoro y la imagen visual y el documental sonoro.
La mañana del miércoles 8 de noviembre inició con una mesa sobre la Universidad y el Documental Sonoro, para replantear el rol de los docentes y las instituciones educativas en la formación de profesionales más comprometidos y creativos.
Candice Carrazco, profesora de la Universidad de Guadalajara en México, compartió sobre el trabajo que realizó con sus alumnos, y como se creó la plataforma de difusión Lab Radio, creada por estudiantes y docentes de la Licenciatura en Periodismo del Centro Universitario de la Ciénega de la Universidad de Guadalajara, con el fin de amplificar el alcance de escucha de sus trabajos.
Además, si bien mencionó que para los estudiantes incursionar no solo en formatos sino incluso en matices más creativos y arriesgados ha sido un poco complicado, el camino continúa e irá tomando mayor consistencia en sus siguientes actividades. ”Ahora tenemos un plan de estudios que contiene una especie de materias ‘comodines’ donde, si se justifica, el profesor puede proponer trabajar lo que quiera, y estaremos probando la enseñanza del documental sonoro luego de haber experimentado con el durante un año y medio”, comentó con una mirada optimista de la apertura de las universidades a la creatividad sonora.
De la intervención de Martín Parodi, profesor y realizador de la Universidad de Rosario, Argentina, nos quedamos sobre todo con la mención sobre la relación del documental sonoro y el periodismo independiente, y su importancia de impartirlo a los alumnos con el fin de mostrarles cómo atraer mejor a esta audiencia que es cada vez más multiescucha.
En este escenario, este tipo de formatos tienen en su creatividad la oportunidad de crear nuevos espacios de difusión pero, como comentó, existe una “necesidad de desaparender las estructuras clásicas del periodismo, como revelar todo al principio”.
Hizo hincapié en generar información sobre el documental sonoro para abrir a la construcción de material que logre desacostumbrar a los consumidores de otros medios y otros contenidos a lo que están habituados.
“Si bien los realizadores de ficción tienen sus desafíos para realizar documental sonoro, tenemos distintos recursos que registramos en nuestro material y que pueden utilizarse. Por ello la importancia de este formato, porque nos fuerza a enfrentar nuevos desafíos”.
Por su parte, Juan Ortega, profesor ICEI y coordinador de la radio Juan Gómez Millas de Chile, compartió su experiencia trabajando con dos ejes esenciales: cooperativismo y autogestión. Una mención particular desde su mirada al rol de documental sonoro en las radios comunitarias: “¿por qué si tu radio está en el campo quiere sonar como una radio de ciudad?”, preguntaba mientras contaba la experiencia de sus alumnos en el trabajo de pasantías en radios comunitarias.
Aquí nos encontramos con la “huella sonora”, probablemente el elemento más importante en la relación patrimonio y paisaje sonoro, el cual no solo permite reflejar la identidad del oyente en la producción que se realice, sino también “formatear a los alumnos”, enseñarles a “pensar y hacer más radio que a ellos les guste, que ellos escucharían”.
La segunda mesa “La ficción en el documental sonoro” inició con Francisco Godinez Galay, director del Centro de Producciones Radiofónicas, miembro fundador de SONODOC, quien hizo hincapié en cómo la ficción asiste al documental sonoro con la inclusión de dramatizaciones y recreaciones donde no se miente, sino que nos puede salvar para contar hechos reales de la historia cuando no podemos acceder de primera mano a los documentos sonoros. Recomienda además recordar siempre que “todo se puede en radio”.
Con la inclusión de estos elementos además logramos acercar al oyente a la experiencia y a que se sienta más identificado. ¨Debemos valernos de las herramientas que nos ha dado el radiodrama, dejar de ponerlos en duda por ser formatos antiguos, ya que todavía siguen vigentes y están muy cerca del paisaje sonoro”, dijo cerrando su intervención enfocada principalmente en romper las premisas instituidas de que los formatos no pueden apoyarse unos a otros.
En esta mesa estuvo también María Paulina Correa, periodista de la Universidad de Chile y realizadora de radioteatros, quien compartió la gran cantidad de trabajos realizados en radioteatro como “Chile en un relato”, 150 capítulos unitarios de manifestaciones de identidad nacional; “Cuentos de misterio”, 50 relatos inspirados en literatura fantástica universal y leyendas chilenas; “A mal tiempo buena cara”, trabajo que toma dichos y refranes de la identidad chilena y elementos de la actualidad del momento; entre otros.
Correa, quien trabaja también talleres de radioteatro para todas las edades, contó cómo todo esto ha permitido alimentar la memoria radial de Chile, así como dejar un legado entre realizadores y actores para el radioteatro.
Cerró la mesa Raúl Rodríguez, director de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Chile, quien nos dejó la reflexión sobre los circuitos de circulación de cada plataforma sabiendo jugar con los códigos de la radio, por ejemplo realizando un correcto casting. Sobre esto compartió 3 fases importantes:
1. Investigación y conversación
2. Construcción de guión y casting radial
3. Devolver el material a la comunidad
Luego vino la conferencia “La imagen visual y el documental sonoro”, donde Charlotte De Beauvoir, periodista y docente miembro fundadora de SONODOC, dio algunos importantes alcances sobre esta relación.
Partió del orden de la activación de los sentidos donde lo visual es instintivamente anterior a la escucha, lo que puede ser aprovechado para generar un complemento al documental sonoro que no necesariamente debe ser secuencial. Sobre esto compartió algunas reflexiones:
1. Se puede generar un diálogo entre imagen y sonido.
2. El sonido puede comportarse de manera autónoma a la imagen, e incluso establecer una doble narración que puede llegar a ser disruptiva.
3. Podemos jugar con la asincronización y la sincronización en busca del punto de equilibrio.
Así culminó la segunda jornada de conferencias para dar paso a los talleres que se realizaron por la tarde, y a las posteriores ponencias en Valparaíso.
De este día pudimos obtener algunas respuestas y muchas preguntas que mantienen la necesidad de seguir con este aventurero camino de definir y construir el documental sonoro en español.