¿Las cosas son simplemente cosas? ¿Podemos sentir amor a primera vista por ellas? Seguramente la respuesta sea no. Salvo cuando hablamos de la bicicleta. Este bonito texto es de Astrud Abeto, sobre su “caballita morada”, su compañera de la vida, que dice, la hizo mejor persona y hoy la deja libre para siga rodando con otras personas.
Caballita morada